Historia

De la primera oficina… y las primeras pruebas…

… a la situación actual de la empresa como protagonista mundial

La historia de HOSCH

De empresa familiar a protagonista mundial

Una idea revolucionaria y un gran espíritu empresarial: en 1975, Hans-Otto Schwarze utilizó esta combinación para crear HOSCH. Las iniciales de este ingeniero titulado sirvieron para un nombre comercial sencillo pero inconfundible.

Con el desarrollo del primer rascador de láminas articuladas, la empresa formada por ingenieros muy cualificados, que todavía era pequeña en aquel momento, sentó las bases para su posterior éxito. Con el rascador tipo A, que se presentó públicamente en la feria de la minería de 1976 en Düsseldorf, HOSCH se ganó rápidamente una buena reputación en la cuenca del Ruhr.

En 1986, la todavía joven empresa dio su gran paso mundial en el ámbito de la tecnología de rascadores con la presentación del rascador tipo B6. Otro hito fue el establecimiento paralelo de su producción propia. Con la introducción de la serie C en 1992, HOSCH marcó de nuevo los estándares técnicos en limpieza de bandas transportadoras.

Desde 1991, las oficinas centrales de HOSCH se ubican en el parque industrial “Am Stadion” de Recklinghausen, en Alemania. Las oficinas centrales se ampliaron en 2001 y actualmente acogen un moderno centro de formación y un departamento de I+D para todo el grupo HOSCH, que ha crecido y está formado por 19 empresas internacionales con más de 500 empleados en todo el mundo. La pequeña empresa anterior liderada por el propietario se ha convertido entretanto en un protagonista mundial, un especialista en productos innovadores que mantiene su posición como líder del mercado mundial en tecnología de limpieza de bandas a través de una expansión y un desarrollo continuos.